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Haikús en español
© by autores
ARGENTINA
Álvaro Yunque (1889-1982)
"Fracaso"
Te has suicidado
con el puñal de un sueño
no realizado.
Carlos Adrián Ramos
Pensar que es falso
Eso llamado cielo.
¡pero qué bello!
Cambian los tiempos
Rodean azaleas
Los adoquines
Carlos Spinedi (1928-)
noche lunar
un ajedrez de sombras
en la terraza
el vaho del té
empaña los cristales
la casa se estremece
Seca una rama
quiébrase entre mis manos
Llega el inverno
El mar anega
el hueco que tu pie
dejó en la playa
Eduardo Gonzales Lanuza
No hay silencio mayor:
dormido en el azogue
un gato blanco.
La ráfaga mojada
golpea nuestra puerta
para añadir fragrancia a las tazas de té.
Ertore José Palmero (1923-)
Haiku in English
Pequeño arco-iris
cerca de la cascada.
¿Cuándo bajó?
¡Mis noches blancas!
¡Veinte años! Y el sendero
entre los pinos.
¡Esos gorriones
alegres, entre cubos
grises de hollín!
Este paisaje
Tiene algo irreal
Todo está vivo
A cada paso
Vas hundiendo los pies
En otra carne
Ya ves el tren
A qué velocidad
Y con fantasmas
Ante los buhoneros
Un perro ladra
Naranjo en flor
A cada rato
Alaridos de viento
Diciendo qué
Aquí también
Mordisquea su sueño
La pobre rata
Hurgan el cielo
La bóveda celeste
Estos anteojos
Viejas historias
Salían de su boca
Igual que dientes
A qué la luz de ayer
Puta tiniebla
Mirá, mirá
Hay un preste cagando
En el baldío
Habla y habla
Entre sueños
Igual se miente
Quietud. Los autos
No dejan de pasar
Por la avenida
Muy buenos días
Muy buenas tardes
Esperando a Godot
Toda la tarde
Viendo llover
Buracos en la puerta
Otoño y árbol
Con qué furor el viento
Muerde las hojas
Ahora sí
Plancha su desnudez
El tintorero
Fumo de paz
Un poquito de buda
Chupando mate
Por qué esta lluvia
Tan entusiasta hoy
Moja los ojos
Miraste el lago
Y esa trucha esa trucha
Se volvió mosca
Adónde irás
Ahora, si tu cuerpo
Se desvanece
Querido escuerzo
No me mires así
Que estoy de paso
Sombras y lejos
Es un fondo deforme
Esta agonía
Cro-cro cra-cra
La alegría del mundo
Te pertenece
Sobre una rama
Seca, dos piernas giran
Aura del sauce
Luna menguante
Las ventanas cerradas
Y el puente roto
Quién ladra en ese perro
A las estrellas
Salta del árbol
Con la gracia de un dios
Caca de mosca
Polifemos del culo
También el ojeroso
Les salió miope
Música salvaje
Su negro corazón
Cuando se ríe
Fierro en su tinta
Faconea la noche
A los ponchazos
Luces y dientes
Con la conversación
Dientes y luces
Antes de irme
Voy a colgar la ropa
En una percha
Casi en el aire
La virgen colgadita
Sonríe y mira
Entre tus piernas
La rabia de vivir
Vale la pena
Nomás la noche,
Nomás la noche, y sí
No más la noche
Fin del partido
La gloria de vivir
Haberte visto
Pozo de agua
En el verdín final
Un sapo mira
Amo la lluvia
La desearía siempre
Sobre mi cara
Lia Miersch (1950-)
Bocas sin dientes
Ríen la misma risa
abuelo y nieto
Ciudad oculta.
Muchedumbre de sombras
al mediodía
Margarita Schultz
primavera
no sé si por mis venas
fluye sangre roja
o savia verde
verano
la miel de los frutos
es generosa
mi paladar se embriaga
otoño
como algunos árboles
también sueño
que aun es primavera
invierno
el frío adormece mi vida
como los árboles
imagino futuros despertares
María Santamarina (1954-)
Agua de pozo:
el niño baja el balde,
sube una estrella.
El viejo roble:
surcos en la corteza
camino al cielo.
Hojas de ginkgo:
por instantes la oruga
es mariposa.
Cuencos vaciós:
cucharas de madera
doblan el alba.
Sola entre lirios
la niña oye el rugido
de los leones.
Flor de magnolia:
y todo su perfume
¡un solo día!
Sobre el tejado
un gato se perfila:
¡La luna llena!
La marea empuja
al bote contra el muelle:
¿Sueño mecido?
Junto a la orilla
los pies y la marea:
¿Quién se distancia?
Arbol de otoño:
¿Las hojas escondidas
en las raíces?
Rafael Roldán Auzqui
En el abrazo,
tú hilo, yo aguja:
cosemos luz...
India en haiku:
voy de un infinito a otro...
Medito en verso
(I)
Tu flor me liba.
Crezco en vos, abeja.
Miel al borde.
Hilos secretos
La trama del aire urden:
tú eres más leve ...
Te sé en mí:
como el sol a la luna
de luz te cubro ...
(II)
Deshoja luz
la frágil rosa blanca:
pura , resiste.
Trama del viento
es el cañaveral;
huso , la luna.
Jacarandá:
se nos va deshojando ...
Extraña el cielo.
Moja de sol
su extremidad el sauce:
se unta de cielo ...
El mar me embiste
con sus dragones blancos:
me espuma el alma ...
Torres (Brasil)
Lentas palomas
tejados invisibles
alzan en vuelo.
Ouro Preto (Brasil)
Teje el cielo
su escritura de luz:
lengua de agua ...
(III)
Nunca regresas
al lugar de partida:
tu viaje es de ida.
Lo bello duele:
demasiado cercano
el Paraíso ...
Valle Hermoso (Córdoba)
Cuando me muera,
no te engañen tus ojos:
naceré a mí.
CHILE
Carlos Correa
En mi ventana
Veo que pasan
Multitudes solitarias.
Andrés Fisher
(Chile, Spain)
Nació en 1963 en Norteamérica, creció en Sudamérica y desde hace doce anos vive
en Castilla.
i.
Un par de moscas
molestan hasta hartarme:
no las mato
ii.
Una tormenta
ruge en el balcón de atrás:
delante solo sol.
iii.
Casa de Nacho
en la quietud estival:
plantas que regar.
iv.
La nina duerme:
el abuelo Cirilo
vela su sueno.
v.
Los dos idiotas
premiados con las ramas
del mismo laurel.
vi.
Un dedo roto:
perdido entre los montes
el brezo arana.
vii.
Puedo caminar
como Bashó: los haikus
son otra cosa.
viii.
Que las moscas no
te impidan ver el monte:
pinos y arroyos.
ix.
El sonido es
parte de esa vaca:
cencerro al cuello.
x.
Mente salvaje:
Nacho & Gary dan juntos
un breve paso.
xi.
Llega el otono:
arroyos congelados
y pinos blancos.
xii.
Llega el otono:
senderos helados y
nieve en las ramas.
xiv.
Sale la luna:
a caballo en el sofá
contemplo y callo.
xv.
Ni la mitad de
capacidad pulmonar:
bruma en la cumbre
xvi.
El metro lleno
un sábado en la tarde:
gente de color
xvii.
Una urraca se
detiene en un tejado:
nubes naranjas.
xviii.
Un atardecer
naranja en las montanas:
campos de otono.
xix.
Hay niebla espesa:
la hierba está húmeda
y el aire es blanco.
xx.
Hierba húmeda:
se escuchan los cencerros
y hay niebla espesa
xxi.
Caen los gotas:
en un charco de invierno
bajo los pinos.
xxii.
Una cigüeña es
mi vecina en la torre
del campanario
xxiii.
Cuarenta años:
duermo en colchoneta en la
casa de la sierra.
xxiv.
En las murallas,
árabe y cirílico:
siglo veintuno.
xxvi.
Manchas de nieve
dispersas en el prado:
comen las vacas.
xxv.
En la montaña,
el sol sobre la nieve:
sombras de pinos.
xxvii.
Cima del monte:
un poco de maría
y mucho cielo.
xxviii.
Cae la tarde:
se endurece la nieve
en el camino.
xxix.
La luna llena
resplandece en la nieve:
pinos y estrellas.
xxx.
Ese individuo
tiene aspecto simiesco:
sapos que croan.
xxxi.
Todas las sobras
son para los pájaros:
no dejan nada.
xxxii.
Una vez mas los
tambores de guerra: la
gata que pare.
xxxiii.
Las estrellas se
van borrando en el alba:
cielo naranja.
xxxiv.
Llueve en la ciudad:
resplandecen los viejos
techos de teja.
xxxv.
Las naranjas de
marzo: en el corazón
de la dulzura.
xxxvi.
Ruinas romanas:
dos mil años y aún me
siento en sus gradas.
xxxvii.
Praderas verdes:
la última nieve en los
montes de mayo.
xxxviii.
Amanece: las
noticias de guerra en la
radio del coche.
xxxix.
Morir: solo dos
fechas en paréntesis
bajo un nombre.
xl.
Muere Felipe en
una noche de eclipse:
llora la luna.
xli.
Calor de mayo:
el olor de los pinos
cruzando el bosque
xlii.
Monte amarillo
el brezo resplandece
en primavera.
xliii.
Cielo estrellado:
con casi cien años
muere la abuela.
xliv
Calor estival:
se agostan los prados y
arden los días.
xlv.
Cuando despertó
el dinosaurio toda-
vía estaba allí.
xlvi.
Calor: arden los
días y el sol derrite
hasta el asfalto.
xlvii.
El vientre de las
palomas resplandece
en el ocaso.
xlviii.
Las olas peinan
de diferentes formas
a esa niña.
xlix.
El perro negro y
la vaca negra juegan
junto al arroyo.
l.
Palomas comen
el pienso de los gatos:
calles de Madrid.
li.
Un avión cruza el
cielo azul del verano:
cima del monte.
Antonio de Undurraga
La mariposa -como
todos-
lleva los ojos
untados de niebla.
El grillo en su negro
peinecillo canta.
¡No vayáis a creer en la muerte!
Berta G. Montalvo
Los cocuyos se pierden
en los palmares.
Amanece otra vez.
En los pantanos
la grulla blanca
es luna llena.
Jorge Teillier
Los charcos
abren ojos aterrados
al oir a los patos.
Las primeras
luciérnagas:
un niño corre a buscarlas
para su amigo enfermo.
Pablo Neruda
Hay algo más triste en
el mundo
que un tren inmóvil en la lluvia?
Cómo se reparten el
sol
en el naranjo las naranjas?
COLOMBIA
Carlos Alberto Castrillon
Blanca mariposa
polvorienta, amarilla
sobre el estiércol.
Viento en la tarde.
Hoy es menos rígida
la cara de la estatua.
German Arias
Telaraña,
aprisionas una pluma.
La araña está muerta.
Vuelo de garza un día
soleado. Bajo sus alas
la oscuridad.
Gloria Ines Rodriguez Londoño
Canto de cigarra;
contra el rojo atardecer
un viejo sauce gotea...
Claro de luna;
sólo luz
el salto del grillo.
Helcías Martán Góngora
El humo:
epitafio del bosque
moribundo.
Sobre el musgo
el huracán y las palomas
yacieron juntos.
Humberto Senegal (1951-)
Luz de luna llena
En el estanque,
inquietos los peces.
Brumoso amanecer.
Las golondrinas despertaron
en otro mundo.
¿Por qué tantas
mariposas rondando
al caballo muerto?
Madrugada.
Las casas salen húmedas
del sueño.
Jaime Perez Russi
Entre la luna y yo,
mi bambú...
movido por la brisa.
Aves en vuelo
suspendidas sobre el mar
por la brisa.
Javier Tafur Gonzalez
Las caras iluminadas
por una luciérnaga.
Hoy no sale la luna.
Sueño entre el sueño.
La garza,
en el algodonal.
Jorge Iván García
El sonido de la quena
despierta las flores
que soñaba el campo.
Polvareda en el
camino.
Se ha despertado
el viento envejecido.
Krishna Vanessa Jaramillo Rodriguez
La lluvia
hace explotar el trueno
en el cielo lindo.
La fila
de las hormigas, en la pared
se pierde.
Raúl Henao (1944-)
La hojarasca de
inverno
Barre a gusto
El viento de mayo.
En el jardín
Blanco pavorreal
La niebla.
Roberto Medina y Agredo
Lluvia en otoño
El fuerte viento
Tristeza que viaja
Veloz gaviota
Sobre al limpio lago
Dos gaviotas
Víctor Sánchez Montenegro (1886-1985)
En esa gruta,
la noche se ha dormino
y no despierta.
Pisé las hojas
secas. Todas soltaron
la carcajada.
Walter Mondragon
Llueve en el bosque,
Umbrío camino a casa.
Croan las ranas
El día calla.
Comienza la monodia
De las chicharras.
CUBA
Ana Rosa Núñez (1926-)
Cangrejo: amigo.
También yo quisiera
desandar mis caminos.
Desde la reja
la lluvia es una jaula
serena.
Mientras despedimos la
luna
con temor salta
el gorrión.
Eduardo Benet y Castellon
El puente viejo
cruje de verse inútil
sobre el arroyo seco.
Por el camino
vi venir una sombra,
y era yo mismo.
Eugenio Florit (1903-1999)
Sola en la tarde
la gaviota vuela
con su cansancio.
Sol de noviembre.
Viejecitos y ardillas
aún en el parque.
EL SALVADOR
Alvaro Menen Desleal (1931-)
COMO EL PAN, SENOR...
Hazme como él:
dorado, nutritivo,
humilde, duro.
HELICOPTERO
Qué mutación:
el colibrí, de pronto,
se vuelve avión.
David Escobar Galindo
46
Cuadro impecable:
Naturaleza muerta,
Memoria viva.
54
Fórmula mágica
Respirar el silencio
Bajo la sábana.
EQUADOR
Cesar Espindola Pino
DIAMANTE
Lágrima de la luna
abandonada en la tierra:
la vanidad te ha recogido.
CIELO
Pradera azul
donde el sol pastorea
su rebaño de nubes.
Jorge Carrera Andrade (1903-1978)
CARACOL
Caracol:
la mínima cinta métrica
con que mide el campo Dios.
Araña del suelo:
charretera
caída del hombro del tiempo.
GOLONDRINA
Ancla de plumas:
por los mares del cielo
la tierra busca.
ESPAÑA
Landeira, Joy.
“Jaiku: El género espanol del siglo XX.”
"Orientalismos: Oriente y occidente en la literatura y las artes de Espana
e Hispanoamérica"
Dept of Modern Languages Series Vol. 2. Barcelona: PPU (2010).
Remapping Genre: Spanish
Jaiku of the Early Twentieth Century
Hispania - Volume 93, Number 4, December 2010, pp. 615-623
Adriano del Valle (1895-1957)
El clarín, sobre la
plaza
abre un quitasol de gritos:
-¡El toro!
Emilio Prados (1899-1962)
La noche, con su café
desveló al agua
y al viento.
Enrique Díez-Canedo (1879-1944)
"Hay-kay de Buenos Aires"
La curva criolla de
una voz
vuelve americana
la calle
Ernestina de Champourcin (1905-1999)
Verja con rosa y
Virgen.
Al alcance de todos,
todas las gracias juntas.
¡Qué pájaro más terco!
¡Siempre con la misma nota, como yo
cuando pido!
Todo el mundo
olvidándote.
Y Tú, desde el cielo,
amándonos a todos.
Genaro Ortega Gutiérrez
Un cigarrillo.
Pero ha durado menos
el aguacero.
Jorge Guillén (1893-1984)
Fútiles cielos
Sin alguna conciencia
Que los abarque.
Allen, Rupert C. "Notes on Self-Transcendence East and West: Jorge Guillén and Haiku."
Dieciocho: Hispanic Enlightenment, Aesthetics and Literary Theory 1 (1978): 160-81.
Juan José Domenchina (1898-1959)
Lluvia de estío:
en los árboles verdes
cuelga sus nidos;
Besos azules:
noches de luna, claras;
cielo sin nubes;
Pájaro muerto,
¡qué agonía de plumas
en el silencio!
¿Qué es el rocío?
La feliz miniatura
del propio nido.
La verdad vale
menos que el labio sabio
que se la calle.
Juan Ramón
Jiménez (1881-1958)
Está el árbol en flor,
y la noche le quita, cada día,
la mitad de las flores.
¡Ay, el aire yerto,
campana en el frío,
ojos en la escarcha!
No sé con qué decirlo,
porque aún no esté hecha
mi palabra.
Tú, palabra de mi
boca, animada
de este sentido que te doy,
te haces mi cuerpo con mi alma.
Es verdad ya. Mas fué
tan mentira, que sigue
siendo imposible siempre.
iQué lejos, azul, el
cielo,
de la tierra pobre! Pero
los dos son el día bueno.
Luis Cernuda (1902-1963)
¿Sabes
lo que espera
el pájaro quieto
por la rama seca?
Lo raro es que al
mismo tiempo
Conozco que tú no existes
Fuera de mi pensamiento.
Como un pájaro de
fuego
La luna está entre las ramas
Del enebro.
Negro es el cuerpo del
árbol
Y gris el aire nocturno,
Oro el astro.
Dios por lo visto hace
muestra
Que ha oído alguna estampa
Japonesa.
María Pilar Alberdi (Argentina, 1954-)
40 haikus (Kindle Edition) Algunos de los haikus que se reúnen en esta obra fueron publicados en francés y español en "Haiku sans frontières ―une anthologie mondiale―". Les Éditions David. (1998) Orleáns, Canadá. Desde el año 2000, uno de ellos se publica en las ediciones en español de la editorial Houghton Mifllin Harcourt (USA). Se divide la colección en haikus de Invierno, Primavera, Verano y Otoño.
Si quieres saber más sobre la autora, visita su blog en http://pilaralberdi.blogspot.com
La inclinada
fragancia de la rosa,
sobre la hierba.
Bajo la tierra
crece un lirio que
ser asombro.
Recuerdo una
lengua, abriéndole
paso al amor.
Del sur vendrá el
verano, en las lanzas
de los cipreses.
En un banco se
posan juntos: un gorrión
y mi mirada.
Llamamos cielo
a aquel azul, después
del primer beso.
Más me pisaban,
más olía a fina
y verde hierba.
El silencio, sí,
interrumpiendo la voz
de los pájaros.
Fardos de heno:
cual ganado pastando
al sol de junio.
Sombra a sombra
los manzanos cruzando
están, el prado.
Mayde Molina
Y frente al mar
crepitan los azules
en mis dos alas
GUATEMALA
Flavio Herrera (1895-1968)
Los cuervos
son papeles quemados
que arremolina el viento.
EL GORRION
Revoltoso y granuja.
Motorcito que vuela
en la punta de una aguja.
HONDURAS
Julio Cesar Pineda
Día:
nadi te exprime;
goteas luz fresca.
Ela aire tiembla
en las ropas
¿de quién teme tanto?
MÉXICO
Alfredo Boni de
"Paraguas"
Flor de tristeza
que se abre cuando el llanto
del cielo empieza.
Armando Duvalier (1914-1989)
"Gusano"
Un diminuto ingeniero
que va midiendo en el día
las longitudes del suelo.
"Cisnes"
No se han disuelto en
el agua
algunos copos de nieve
que cayeron en el alba.
"Orquideas"
Allá, en la selva
vecina,
un millión de mariposas
quedaron semidormidas.
Carlos Gutiérrez Cruz (1897-1930)
http://www.jornada.unam.mx/2002/07/21/sem-leon.html
El alacrán
Surge de algún rincón
enmedio de un paréntesis
y de una interrogación.
La bandera
Bulliciosa y bélica
guardiana de la azotea
Los ratones
Los ratones detrás de la mampara,
escriben a máquina.
El pelícano
Cafetera de porcelana
que va flotando por el agua.
Hai-kai comunista
La tierra es para los seres que ha creado,
igualmente para todos,
Sin Casa Blanca ni Imperio Británico.
Efrén Rebolledo (1877-1929)
“La señora Flor”
Se prosterna hasta besar la limpia estera,
Y sentándose medrosa en sus talones
La señora Flor, me mira zalamera
Prometiéndome ignoradas emociones.
Fuji-No-Yama (fragmento de soneto)
Del alba transparente
a los albores
muestra kimono…
Elías Nandino (1903-1993)
Una gota de rocío
y dos pétalos de rosa
¡hacen una mariposa!
"Derecho de propiedad"
¡Nada es tan mío
como lo es el mar
cuando lo miro!
Francisco Alday (1908-1964)
"Tercera caída"
En Jericó, una tarde,
se venían de rosas
los rosales.
Francisco Hernández Pérez 1946-)
PINO SECO
pino seco
en medio de lo verde:
llamarada
BAJO
bajo la lluvia
posa desnuda para mí
la tarde
Francisco Hurtado Mendoza
Ladran los perros...
La luna tiene miedo
tras de los cerros.
Tierra mojada
y el canto de los grillos
de madrugada.
Francisco Monterde (1894-1985)
[Francisco de Asís Monterde García Icazbalceta]
"El jardín del pueblo"
Jardín municipal:
bancas de hierro con ociosos
que miran el kiosco central.
"Reloj Público"
De la torre mojada
el vetusto reloj
deja caer las horas como lágrimas.
"Luna de Veracruz"
De las aguas
la luna saca a flote
la plata que se hundió con los piratas.
"El Hotel"
Corredor con macetas;
cuartos que huelen a humedad
y lechos como cortesanas viejas.
"Fuente"
Nada, queriendo en su fuga
salirse de la concha, una tortuga.
"Reciprocidad"
Para el águila -punto en lo azul-
el tren es un gusano de luz.
"Sol de tarde"
El oro en la espadaña
y llamarada viva
en la pelambre roja de las vacas.
*
¡Qué nota blanca!
En la verde llanura,
plumón de garza.
Gabriela Rabago Palafox
Flor del naranjo,
¿qué dejará de tu ser
la primavera?
Copos de nieve
endurecen la fuente.
El pez observa.
Gustavo Carballo
entre los lirios
a un lado del camino
la lavadora
Jorge Mouriño
Prende el otoño
en la desnuda rama,
la mariposa.
Hondo en lo oscuro,
el rescoldo de los astros
chisporrotea.
José Dolores Frías (1891-1936)
[José Dolores Frías Rodríguez]
En tus cabellos
se apaga una luciérnaga:
mi pensamiento.
¿De qué laguna
surgió el tallo ondeante
de tu cintura?
El sol labriego
transfigura las cosas,
y yo estoy ciego...
Maldito y único
tu amor me salva,
truenos de triunfo.
En cada día
hunda la angustia nueva
una semilla.
Un brote nuevo:
¿quién va a buscar torturas
en un recuerdo?...
Si mi esperanza
fuese una luz sincera:
¡Colmena mala!...
Fue de tus labios
aquel coral: recuerdo
que yo he escuchado.
Y nauta ebrio
solté velas y rizos,
¡los tuyos luego!
José Juan Tablada (1871-1945)
José
Juan Tablada. Un día...
José Juan Tablada. La feria
José Juan Tablada. El
jarro de flores
José María González de Mendoza (1893-1967)
"Dos paisajes"
Colinas:
valles y cimas
¡La vida!
"Ambición"
La gota de agua
cayendo, cayendo,
se suena Niágara.
"Nota"
En los alambres
golondrina posada:
la del paisaje.
Mi vida es muda,
ni novia ni amistades...
¡Ah, sí! La luna.
El rojo acento
de tus labios me llama
donde me quemo.
José Rubén Romero (1890-1952)
Día de oro.
La reata cierra su interrogación
en los cuernos del toro.
La plazuela
Sesión permanente,
Los viejos del pueblo discuten
la honra de toda la gente.
El médico
Barba canosa, lustrosa
levita
Narrando sus viejas memorias
olvida cobrar la visita.
El granero
Buscando huevos de gallina
por los rincones del granero
hallé los sesos de mi prima.
La lluvia
Mientras al rosario trota la beata,
Tláloc alisa sus barbas de plata
sobre las torres de la Colegiata.
El Presidente Municipal
Perfil de milano,
la leontina de plata bordando el chaleco
y el grueso bastón de cerezo en la mano.
El rebaño
Pasan las ovejas cubiertas de lana.
El pastor las sigue, desgarrado y mudo.
A ellas Dios las viste.
Al pastor el amo lo deja desnudo.
La carreta
Lecho nupcial
del caporal.
troje que guarda el nuevo cereal
y, en día de fiesta, carro triunfal
Juan Cervera y Sanchiz
La mariposa
se detiene un instante.
Tiembla la hoja.
Llueve despacio
sobre la casa vieja.
Cruje el misterio.
Olga Arias
AUDITIVA
El grillo en su
rincón:
Una florida ventana
sonora.
COMUN
Un día feriado.
La esperanza y la tristeza
de paseo.
Rafael Lozano (1899-1963)
Silente
me contemplas extática
como en el templo Budha.
Naranjos
floridos en el parque
¡y tú debajo de ellos!
El barco
deja sólo una estela.
Nosotros, ¿qué dejamos?
En mi embeleso
tengo el alma florida
como un cerezo.
Me dejas
dulces de miel los labios
como panal de abejas.
El cisne
se muere de nostalgia
sin lanzar una queja.
GEISA
Sale de su kimono,
como de su capullo
la mariposa.
Xavier Villaurrutia (1903-1950)
"Reloj"
¿Qué corazón tan avaro
cuenta el metal
de los instantes?
PERU
Alberto Guilén
Cuando camino
todo el paisaje se pone en movimiento
conmigo.
Como anoche ha llovido
se le ha refrescado
la voz al río.
Alfonso Cisneros Cox (1953-2011)
Un charco:
la calle inundada
de cielo.
Agua tranquila:
ligero el sonido
del amanecer
No hay movimiento:
el ruido de las peñas
el bote viejo
Brisa tranquila
un quenual de oro
muda su piel
Natura viva
1
Árbol quebrado
sólo te alumbra
la rama del sol
2
Baja marea
empozados los ojos
del mar
3
Lento atardecer
la sombra proyecta
su lengua de piedra
4
El silencio acaba
en cada ola
que empieza
5
De salto en salto
El petirrojo enciende
La enramada
6
Clara cascada:
el tiempo lava
la piedra
7
El viento silba
dentro de un pájaro
herido
8
La hormiga deambula
sobre el secreto
de la piedra
9
Desnudo techo
Extraños quehaceres
De la araña
10
Río detenido:
frente al mar se han posado
dos orillas
11
Imperceptible
la secreta blancura
de la noche
12
Aroma de jazmines
¿alguien toca
mi puerta?
13
Amarillo y azul
en la jaula cautivos
cielo y sol
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Colibrí:
corazón detenido
en cada flor
Carlos Zuñiga Segura
Esta mañana
cae agua del cielo
voces felices
Con esta lluvia
mis padres llegan puros
¡Oh viejo hogar!
Cesar Toro Montalvo
CEREMONIA DEL TE
Ceremonia del té
dobladura, paz...
Santuario en el aroma.
Una gota rueda
gira, toma curso...
El universo se humedece.
Inés Cook
Estas gaviotas
Son la clara señal:
Impermanencia.
Cae la lluvia
Sobre el pequeño muro:
La flor marchita.
Javier Sologuren (1921-2004)
Cerrado cielo.
En una callejuela,
se rasca un perro.
Nada me apura.
Blanco contemplo
el vuelo de la grulla.
La tinta en el papel.
El pensamiento
deja su noche
¡Oh agua quieta,
que silencioso el mundo
en ti despierta!
Lunar magnolia,
el fuego diurno
tocó su carne.
PUERTO RICO
Isaac M. Colon Francia
La luna duerme
más cerca de mi pueblo.
¡Cuánta quietud!
Una gaviota
aferrada a la negra
roca, dormita.
José M. Oxholm Lopéz (1927-2004)
http://members.tripod.com/~blueflower/poetry1.htm
http://members.tripod.com/~blueflower/poetry1a.htm
Cada pino un fantasma
esta noche
de luna.
En esta soledad
conversan
mi sombra y el silencio.
URUGUAY
Teresa N. Marzialetti de Gaspari
Silencio de árbol
seco,
risa cristalina de niños
entre las ramas secas...
Un pétalo
de geranio mustio
cayó del tapial blanco...
Luis Yuré
Sueñan las hojas
En el libro cerrado
dormita un bosque.
Baja al río
el ciervo del verano
Sorbe, lo seca.
El pino grita
Confunde al abedul
con un fantasma.
VENEZUELA
Jean Aristeguieta
Las hojas del otoño
despiden mariposas
amarillas nostalgias
Para el poeta
nada se extravía
así la noche
Victor Manuel Crespo L.
Cae la tarde.
En reverente oración
los girasoles.
Nido vacío.
Queda el árbol
como abuelo solitario.